jueves, 29 de noviembre de 2012

Koy Shunka, intenso aroma de temporada.


 
En el número siete de la calle Copons de la ciudad Condal se encuentra uno de los mejores restaurantes japoneses de España, sin duda es un buen restaurante pero nosotros no lo calificamos como el mejor.
 
Al restaurante se accede por un largo pasillo, que deja una primera barra más de cafés a un lado para en el fondo encontrarnos con la barra japonesa donde Hideki Matsuhisa termina los platos y desde donde también se ve la cocina abierta con grandes cristaleras. Más al fondo, hay otro pequeño comedor pequeño y muy acogedor. La decoración es minimalista japonesa.
 
Como su nombre reza, encontramos productos locales de temporada llevados a una cocina creativa japonesa con unos sabrosos sabores e intensos aromas.
 
Estuvimos indecisos entre el menú Koy y el (g)astro pero continuábamos algo llenos del almuerzo en Abac, por lo que nos decidimos por el más corto mientra tomabamos unas Kirin.
 
La noche comenzó con dos aperitivos y el primero de estos fue una estupenda sopa de miso con espuma de yuzu, que nos levantó el ánimo.

 
 
 
El segundo aperitivo fueron unas patatas japonesas acompañadas de una salsa de foie y yuzu. Más buena la salsa que las patatas.
 
 
 
Vieira - Maiz. Sashimi de vieira, mini maíz, trufa, gelatina de bonito. Buen producto.
 
 
 
Anchoa con espárragos blancos de Gavá. Un entrante con el que continuó subiendo el nivel.
 

Guisantes de Sant Andreu de Llavaneres con chipirón y germinado de guisante. Para repetir una y otra vez, sublime.
 
 
Fideos japoneses Somen con secreto de ibérico. Buen caldo hecho con bonito seco.



 Sashimi de  bonito, pescado blanco pajel, toro, lomo de atún y calamar; este último fue más complicado por su textura.


 
 Toro tataki con arroz integral japonés y alga nori. Buen plato.

 
Ternera japonesa "Wagyu" con murgulas en cazuela japonesa. Wagyu de Burgos con miso y colmenillas. Bien sin más.

 

 
Sushi, cuatro buenos bocados.


 

 Gamba de Palamós y Anguila del Delta del Ebro, el último más flojo.
 
 
Roll de Aguacate, atún y salmón y Nigiri de Toro, dos deliciosos bocados.
 
 
Postre Helado de yogur con yuzu. Crema de chocolate blanco, frutas del bosque. Dulce final al que siguieron unos cafés en la barra puesto que doblaban mesa. Habíamos sido avisados al hacer la reserva.



Cenamos con un Riesling Quinterra Trocken.

El servicio midió en exceso los tiempos y cenamos algo rápido, aunque doblaban mesa salimos antes de tiempo.

 


Restaurante Koy Shunka
Copons, 7 08002 Barcelona
tel. (+34).934.127.939 
domingo noche y lunes cerrado
No aceptan reservas por email
www.koyshunka.com
Total factura: 186,60 euros.
2 Menú Koy: 144,00 euros.
2 Kirin Ichiban: 8,20 euros.
1 Riesling Quinterra Trocken: 30
2 cafés: 4,20 euros.

jueves, 22 de noviembre de 2012

Abac, una de las grandes mesas de España.



Al entrar en el hotel, por el cuidado exterior y diseño, ya se puede intuir que el restaurante es un lugar apacible, sereno y elegante, donde aun estando dentro, las enormes cristaleras hacen posible disfrutar del magnífico jardín.
En el interior predominan los blancos y neutros, con amplias mesas elegantemente vestidas y bien iluminadas con magníficas lámparas de diseño.

Tras una correcta recepción fuimos hasta la mesa donde nos ofrecieron un aperitivo que disfrutamos deleitándonos repasando la carta y en especial "El Gran Abac Menú", en el que Jordi Cruz  mezcla los ingredientes de los que mejor dispone como son talento, técnica, creatividad y esa chispa que sólo unos pocos poseen para dar con productos dispares que maridan perfectamente en sus creaciones. Estamos seguros de que este joven Chef es una gran promesa, el cual ya cuenta con un vertiginoso curriculum e importantes premios,

 Comenzamos con "Melón Mojito": Buen inicio con un aperitivo de mojito con un helado cremoso de hierbabuena, dados de melón, caña de azúcar en lo alto para degustar con azúcar totasda y lima.


Piruleta nitro de yogur salado y caviar de Irán, como casi todos los nitros que hemos tomado esta piruleta se prepara en sala desplegando para ello el espectáculo que la propia elaboración conlleva; para repetir una y otra vez este contraste de texturas y sabores.


 
Fina focaccia de foie-gras, piñones tostados, consomé de cebollas con trufa lio y raspadura de pieles de naranja. Destaca un predominante sabor a naranja en excelente combinación con el foie y agradables tropezones de piñones.

 
Ceviche Hamachi con cerezas y nieve de pepino. Más que sobresaliente para este entrante donde el pepino granizado deja un sabor fresco y picante al final.


Los tomates rama desecados con agua de pimientos al aceite de oliva, sardina ahumada, “coladura” de anchoas, piel de pan y albahaca. Gran caldo de pimiento que potencia el sabor de los tomates, con deliciosos tropezones de sardina ahumada. La piel de pan no nos pareció tan acertada en cuanto a textura.


Ostra de Marennes-Oléron tibia con pichón, agua concentrada de hongos, panceta, trompetas de la muerta y salsifíes. Potente y sabrosa salsa de hongos, panceta y salsifíes en contraposición con una delicida ostra.

Bistec tártaro ahumado, nieve de ternera aliñada, yema cocinada, velo de mostazas y crujiente de pan a la pimienta. Audaz interpretación del tradicional steal tartar que va de menos a más, según se van interpretando en boca sabores y texturas.


La yema de huevo cocinada con ibéricos, parmentier de patata, aceite de trufa y rúcula. Este plato siempre es un valor seguro, aunque hay que decir que es una interpretación personal y atrevida para dar lugar a un sabor muy tradicional.

 

Cigalas, avellanas como garbanzos, jugo de fideuà, pollo a la brasa, allioli de citronella y corales al aceite de oliva.
Por un lado llegan las cigalas sobre una placa de sal del Himalaya con un pequeño hornillo que la calienta, se terminan de hacer en la mesa tomando el sabor de la sal...



En otro plato se nos presentan unos falsos garbanzos de avellana sobre un consomé concentrado de fideua con tropezones de pollo a la brasa crujientes y alioli de citronella algo fuerte.


Cuando están las cigalas se toman con los falsos garbanzos y se disfruta de un soberbio juego de texturas y potentes sabores.


Ventresca de atún mediterráneo con macarrones de ponzu, piel de kumquat, mizuna, calabacines al aceite de oliva y puré de raíces picantes. Este es uno de los mejores paltos de la velada. Simplemente perfecto.


Pasta Caserecce cocinada en agua de cebollas con lágrima ibérica y foie gras a la brasa. Buen fin de fiesta salado, donde la pasta llegó en su punto y el acompañamiento no pudo ser más acertado.
 



Uvas fragantes con lichis. Un postre refrescante y nada empalagoso.


Tierras ahumadas, plátano, café, cacao, vainilla y bourbon. Continuamos con un postre más intenso, por un lado llegan unos daditos de bizcocho al bourbon caramelizados y por otro el resto del postre. Sabores intensos que luchan por destacar en el conjunto y todos armonizan en su perfecta medida.


Sobre crujientes galletas, nieve de yogur, néctar de flores y violetas. Como si de una montaña rusa de sabores potentes y delicados se tratara, ahora descendemos a un postre más delicado pero no menos bueno que evoca sabores de la niñez.


Continuamos con una cuajada de leche de cabra.

 
Para terminar llegaron unos petit fours donde destacó un divertido pintalabios de helado de rosas y frambuesas
 

Acompañamos el menú con un Delamotte Brut, perfecto para un almuerzo de sábado.

Al final salió Jordi Cruz a saludar a las mesas, un detalle que nosotros valoramos muy positivamente.

Todo esto acompañado de un impecable servicio de sala hicieron que salieramos plenamente satisfechos de la experiencia y con la sensación de haber disfrutado de una de las mejores mesas de España.



 
 
Restaurante Abac
 Avda. Tibidabo, 1 - 08022
Barcelona (España)
Tel. +34 93 3196600
 
 
 
Total factura: 391,49 euros.
2 Gran Abac Menú:290,00
2 servicio pan y mantequilla: 9,00 euros.
1 Martini: 5,00 euros.
1 Cerveza: 7,47 euros.
1 Delamotte Brut: 60,00 euros.
1 Agua Sant Aniol: 4,00 euros
2 cafés: 8,00 euros.
 
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
 

martes, 6 de noviembre de 2012

Albora

Sólo fuimos una vez al restaurante de Sula. La barra siempre nos gustó, pero el restaurante nos decepcionó bastante en esa única visita. Ahora sus propietarios, José Gómez y Cayo Martínez, le han dado un giro radical al negocio, con cambio de nombre incluido y, sobretodo, con la incorporación de nuevos profesionales. Como jefe de cocina oficia David García, joven vasco discípulo de Berasategui y con una larga estancia al lado de Joseán Martínez Alija en el Guggenheim. El jefe de sala es ahora José María Marrón, reconocido sumiller con una larga trayectoria en el hoy desaparecido Balzac. Y al frente como director, Jorge Dávila que, tras convertir Piñera en un referente del servicio de sala de alto nivel, imprime ahora su sello en los comedores de Jorge Juan, 33.

Visita 3 de Noviembre de 2012

La carta de Albora nos ha parecido tremendamente atractiva: buena materia prima con elaboraciones tradicionales puestas al día y cuidado en las presentaciones. Además, puntos muy positivos como son la atención al producto de temporada y la aplicación de técnicas poco habituales como la cocina al carbón.

Empezamos con un aperitivo que consistió en una deliciosa crema de calabaza.



La carta ofrece la posibilidad de pedir medias raciones, y así, bien aconsejados por Jorge, pudimos confeccionar un menú en el que combinamos platos de la carta con buenas sugerencias fuera de ella.

El primer entrante consistió en unos boletus salteados al carbón. Buen producto, sabor característico y delicioso.




Huevo asado de caserío con láminas de tocino ibérico gratinado sobre cama de patata rota y caldo concentrado de garbanzos y jamón. De repetir, el caldo de garbanzos sobresaliente.



Txangurro a la vizcaína: sabor intenso, impecable.



Como  principales:

Cocochas de bacalao al pil pil con mejillones de roca y txacoli: buen pil pil aunque el plato no nos acabó de convencer.



Manitas de cerdo asadas, deshuesadas y rellenas de cebolleta trufada y brotes tiernos de ajo: gran combinación de sabores y texturas. Como crítica decir que debería haber llegado un punto más caliente a la mesa.



De postre una gran torrija caramelizada con un buen helado de plátano y canela.



Antes de los cafés, un poquito de kéfir con menta.



Carta de vinos bien seleccionada y a precios razonables. Elegimos un Domaine Ostertag Riesling Vignoble d'E 2009.

En el comedor de Albora se está a gusto. Tras los cafés acompañamos la sobremesa con unos gin tonics de Tanqueray Rangpur. Tuvieron el detalle de invitarnos a los combinados.

Nos ha dejado una gran impresión esta primera visita a Albora. Dejamos pendiente la barra para otro momento.



álbora
Bar&Restaurante
Jorge Juan, 33
28001 Madrid
91 781 61 97
 
 
 
Total factura: 136,68 euros.
2 servicio pan y aperitivos: 5,50 euros.
1 Riesling Ostertag: 28,60 euros.
2 cafés: 5,23 euros.
2 gin&tonic: invitación.